La amplia variedad que existe en el mercado de las galletas responde al gran abanico de perfiles que la consumen. Porque…¿quién no come galletas? Hoy te hemos traído los diferentes tipos consumidores, y todo lo que pueden beneficiarse de este tradicional producto:
Niños y adolescentes: constituyen una fuente de energía, gracias entre otras cosas a los cereales, por lo que ayuda en su crecimiento, favorece su desarrollo y rendimiento intelectual.
Adultos: en función de la galleta, pueden representar un picote saludable, que además produce saciedad.
Tercera edad: ingredientes como el aceite de oliva o el sésamo, suponen una gran fuente de nutrientes, y aportan mucha energía en una edad en la que es muy recomendable.
Diabéticos: nuestra gama sin azúcar supone un desayuno, merienda o picoteo perfecto para este colectivo. Así, pueden disfrutar de todo el sabor de este producto sin problemas.
Deportistas: ¡cómo no! Permiten un mayor rendimiento físico gracias a la energía que aportan. Y también después, es un alimento muy recomendado que previene la hipoglucemia.
Como puedes ver, hay una galleta para cada necesidad. ¿Nos ayudas a identificar más colectivos que la consuman? ☺